El Córdoba Technology Cluster (CTC), una entidad que nació hace 22 años para desarrollar la industria del software en la provincia anunció este jueves que deja de ser una entidad exclusiva de este rubro y se abre para cobijar a distintos sectores de la economía del conocimiento.
Su nuevo nombre será Córdoba Cluster (CC) y reunirá entre 700 y 800 empresas, mayormente pymes.
La entidad tecnológica tiene hasta ahora cerca de 360 socios entre las filiales de Córdoba, de San Francisco, de Villa María y de Río Cuarto.
La nueva propuesta abre el juego a otras entidades ligadas a la economía del conocimiento, como la Cámara de Industrias Informáticas y Electrónica (Ciiecca); el Cluster BPO-KPO; la Cámara Aeronáutica (Carae); el Cluster de Biotecnología; la Asociación de Maquinaria Agrícola (Afamac), y la Asociación de Productores Audiovisuales.
La economía del conocimiento no es un rubro bien diferenciado, sino más bien transversal a distintos rubros, y se caracteriza por la aplicación intensiva de tecnologías, de información y de conocimiento a la producción. Incluye software y desarrollo de soluciones IT (tecnologías de la información, en inglés), soluciones en IoT (internet de las cosas) y tecnologías 4.0, productos audiovisuales, servicios profesionales, servicios geológicos, tecnologías químicas y biológicas, bioingeniería (bío y nanotecnología, microbiología, etcétera) e industria espacial y satelital.
Según datos relevados por el Gobierno provincial, se trata de la tercera industria en Córdoba en cuanto a impacto económico, con más de 2.900 empresas y 57 mil empleos.
El anuncio se hizo en el marco del acto de lanzamiento de la 11ª edición de la Semana TIC, que viene desarrollándose desde el lunes en distintos puntos del interior y que cierra con actividades entre hoy y mañana viernes en el Centro de Convenciones Córdoba y en el Complejo Ferial. El evento, donde La Voz es media partner, es organizado por el Córdoba Technology Cluster y el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Provincia.
“Venimos reuniéndonos desde hace varios meses con muchas de las entidades. La idea es armar una mesa para dar representación a la economía del conocimiento, independientemente de que cada sector mantenga su organización y el trabajo en su propia actividad. La idea es tener temas que podamos trabajar en conjunto; de aquí en más, está todo por construirse”, dijo Pablo Gigy, quien a partir de este jueves pasa a ser presente del Córdoba Cluster.
Si bien, aclara el empresario cordobés, este es un primer paso para comenzar a trabajar, en lo formal desaparecerá el Córdoba Technology Cluster para abarcar a otros rubros.
En el marco de la apertura de la Semana TIC en Córdoba, el ministro de Ciencia y Tecnología de la Provincia, Pablo De Chiara, manifestó su entusiasmo por esta iniciativa. “Esta decisión es una evolución natural, asumen un liderazgo compartido, porque implica un grupo de instituciones que está pensando en la economía del conocimiento de una forma más integral. Esto significa mucho para Córdoba, porque con esto se simplifican el diálogo institucional y el ejercicio de pensar en políticas para este sector”, afirmó.
En este marco, el funcionario anunció que ya son 110 las empresas que adhirieron a la Ley de Economía del Conocimiento provincial, con lo cual Córdoba es la segunda jurisdicción en el país con más empresas después de la ciudad de Buenos Aires (Caba) y el régimen promocional subnacional con más integrantes. Además, hay 128 firmas en el régimen nacional.
La Semana TIC incluye una serie de charlas, de exposiciones y de actividades, como también capacitaciones con especialistas, actividades interactivas, espacios de vinculación, talleres y exposiciones de productos y servicios, tradicionalmente ligado a la tecnología. Este año amplió su horizonte a todo el ecosistema de la economía del conocimiento. De ahí que sumó actividades científicas y la investigación, nanociencias y nanotecnología, el asesoramiento profesional, entre otros.
Los interesados pueden consultar la agenda en semanatic.com.ar
LOS SERVICIOS BASADOS EN EL CONOCIMIENTO
Una de las conferencias de la Semana TIC abordó precisamente la situación de los servicios basados en el conocimiento con el título “Panorama, retos y oportunidades”, donde se planteó la participación relativa de la Argentina en el sector y qué incentivos se necesitan para el avance de este ecosistema.
La conversación, moderada por el periodista Daniel Alonso, de La Voz, contó con la participación de De Chiara; de Romina Gayá, economista y consultora, y de Gustavo Campos, socio PwC Argentina.
Todos coincidieron en que es imperioso el reordenamiento integral de la macroeconomía para frenar la profundización de las distorsiones en las que operan todos los rubros en este sector.
Pero también fueron críticos con algunos fenómenos emergentes (la informalidad y los monotributistas “tech”, por ejemplo), las expansiones por fuera del país (migración de talentos) y otros más crónicos y que persisten más allá de la situación económica, como el déficit de dominio de inglés, la intensidad de la articulación con el sector académico y los limitantes de infraestructura.
“Es vital que el sistema se pueda reproducir; de lo contrario, cada vez será mayor la ‘commotidización’ de lo que producimos y eso es un círculo perverso. Esto es como el stock y el flujo. Si no tenemos flujo, nos vamos a comer el stock. Ese es el riesgo”, advirtió De Chiara.
Gayá, por su parte, indicó que en la Argentina el sector sigue creciendo, aunque lo hace a una tasa mucho menor que en el resto del mundo; además, advierte, este año ha desacelerado el ritmo por las restricciones macroeconómicas.
Ese fenómeno contrasta con lo que ocurre en países limítrofes, como Uruguay y Paraguay. Y puso como ejemplo a Costa Rica, cuya productividad sectorial en economía del conocimiento está a la altura de países desarrollados.
Campos, en tanto, aportó recomendaciones para la internacionalización de las empresas y explicó cómo aprovechar una dinámica global que, además, le permitiría al país acceder divisas en medio de la profunda sequía de reservas del Banco Central.
En términos oficiales, el sector aporta alrededor de U$S 8 mil millones vía exportaciones, aunque se descuenta que esa cifra es mucho mayor por el peso de la informalidad y de los servicios que prestan individuos de manera particular.
A nivel empleo, se calcula que hay casi 490 mil personas con un empleo registrado en la economía del conocimiento, pero también se da por hecho que el universo tiene un alcance mayor.
FUENTE: Facundo Luque/La Voz